Hace falta, realmente mucha falta alejarse de todo y ver las cosas desde afuera. Aunque todo de repente puedo ser medio bajón, pero si no lo haces hoy, ¿Cuándo? Yo puedo decir, que hoy, convivo conmigo misma y mis problemas, dejé los problemas de los demás para ellos, sus quilombos, sus locuras, para el que las quiera soportar, yo hoy, no quiero lidiar con nadie que tenga intenciones de lastimarme, de ser un pelotudo conmigo. Estoy mirando muchas cosas que antes me atrapaban desde afuera y hoy me río porque entiendo las cosas de otra forma, que puede o no ser la correcta, es solo una perspectiva diferente. Son etapas que pasan, que van y que no se extrañan, ni siquiera en los momentos de debilidad porque sabes que, anteriormente, esas eran las situaciones que te ponían débil. Por suerte hoy todo ya pasó, bah, por suerte no.. Gracias a mi. Gracias a todas las personas que me enseñaron cosas, me di cuenta que hasta el más inútil, me mostró una parte de mi, que no conocía. Parezco una vieja de cincuenta años hablando así, agradeciéndole a todo el mundo, pero es que al fin y al cabo, es así, uno no es más que uno y cada persona nos va mostrando diferentes aspectos, nosotros no cambiamos, por eso hay que agradecer hasta a la persona esa que pensamos que nunca debió haber entrado en nuestra vida, porque incluso esa persona, nos demostró que las apariencias engañan (por ejemplo) hoy estoy, estoy mejor que antes y con más experiencia, me alegro inexplicablemente de haber pasado todo, de haberme encontrado en este momento. Obviamente que esto, recién está empezando, pero haber cambiado de perspectiva, fue un gran gran paso.
